Codere negó que esté pensando dejar el país

MADRID.- El cepo a la salida de divisas estuvo cerca de provocar otro conflicto http://www.lanacion.com.ar/588630-un-grupo-espanol-tras-el-negocio-del-juegohttp://www.lanacion.com.ar/1204676-codere-gano-el-hotel-carrasco-y-desplazo-al-grupo-libermanque administra 14 bingos de la provincia de Buenos Aires, desmintió que fuera a dejar el país por las restricciones a retirar dividendos, en medio de una guerra de intrigas en la que sobrevuelan sospechas de un intento hostil de desbancar a la firma del multimillonario negocio de las apuestas en territorio de Daniel Scioli."No hay nada. De ninguna manera se está pensando en vender; recientemente se renovaron parte de las licencias y la decisión es seguir en la Argentina", dijo aquí a LA NACION un vocero oficial de la compañía.Desmintió así versiones publicadas en la Argentina esta semana sobre la supuesta intención de Codere de desprenderse de todos sus activos en el país.Codere maneja la mayor cuota del juego bonaerense, que aporta a las arcas de Scioli casi 2600 millones de pesos al año. Según sus balances, la empresa computó por ingresos de explotación en la Argentina 653,8 millones de euros, un 39% de lo que facturó en todo el mundo. Registró ganancias por 142 millones de euros.El grueso de ese dinero se queda en la Argentina por fuerza de las restricciones que impone el Gobierno y, en ámbitos empresariales españoles, se alimentó la sospecha de que Codere iba a estar obligada a vender, ante la inminencia del vencimiento de elevados compromisos de deuda. Pero fuentes del sector del juego sospechan que las versiones tienen otro origen: competidores ansiosos por quedarse con el gigantesco negocio de los bingos y las máquinas tragamonedas de la provincia.Uno de los grandes jugadores del sector, Cristóbal López, nunca pudo entrar en territorio bonaerenses y se menciona a otros empresarios afines al kirchnerismo como interesados en sumarse a esa fuente segura de ganancias.En sectores políticos españoles admiten que Codere dejó oír su queja por las trabas al giro de dividendos y los inconvenientes que esto generaba en sus operaciones globales, afectadas por fuertes pérdidas en México y en el mercado español. Y añaden que hubo discretas gestiones para intentar que el grifo se abriera...