El modelo alemán se abre camino a la cumbre europea

La Bundesliga está cumpliendo 50 años y parece dispuesta a festejarlo con la conquista futbolística de Europa. Nada que debería sorprender tratándose de un país con una histórica tradición ganadora. El inglés Gary Lineker creó hace varios años un aforismo que periódicamente se repite hasta la saciedad: "El fútbol es un deporte de 11 contra 11 en el que siempre gana Alemania" . La sentencia tuvo una comprobación fáctica durante la segunda mitad del siglo pasado, tanto en el nivel del seleccionado como en el de clubes. Siempre quedaba a mano para sintetizar el pragmatismo, la contundencia y el indoblegable espíritu germano. Quedó instalada, pero los acontecimientos de los últimos años la hicieron menos taxativa y le agregaron matices. Y derivó en una paradoja: el fútbol alemán, sin ser una ruina en materia de resultados, dejó de acaparar mecánicamente títulos, pero ganó en encanto, en estética, en creatividad, en recursos técnicos.Detrás de todo eso hay una competencia interna que Europa la señala por modélica, tanto en la organización económica y por su espectáculo de masas como por el modelo futbolístico. Para darle más visibilidad a ese escenario, nada mejor que estas semifinales de la Liga de Campeones en dos días que ya son históricos para Bayern Munich y Borussia Dortmund en particular, y para el fútbol alemán en general. Martes de 4-0 a Barcelona y miércoles de 4-1 Real Madrid. Partidos inolvidables. Los dos colosos de España, a los que les queda chica la Liga de su país y necesitan legitimarse en el plano continental, recibieron la lección que ellos suelen impartir. Dos resultados de repercusión planetaria con un fuerte trasfondo futbolístico, a partir de la superioridad colectiva e individual que demostraron los dos equipos.El seleccionado, la célebre Mannschaft, no obtiene el Mundial desde 1990 y no levanta la Eurocopa desde 1996. El último campeón alemán de la Liga de Campeones es Bayern Munich, en 2001. En la Liga Europa (ex Copa UEFA) no hay un equipo germano en lo más alto del podio desde 1997, con Schalke 04. El Siglo XXI parece desmentir a Lineker, sin que Alemania haya resignado su condición de candidato y continuo animador, como lo atestigua el segundo puesto en el Mundial 2002 y los terceros en 2006 y 2010. De la Eurocopa tampoco desertó prematuramente: finalista en 2008 y semifinalista en 2012. En el rubro clubes, Bayern Munich se quedó a las puertas de la vuelta olímpica en las finales de la Liga de Campeones de 2010 y 2012. La...

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