El fallo mantuvo la validez de las pruebas que reunió Rívolo

La resolución del juez federal Ariel Lijo convalidó las pruebas recolectadas por el fiscal Carlos Rívolo en la "causa Ciccone" durante los últimos tres meses. Así, aunque el investigador quedó afuera de ahora en más de la pesquisa, su labor quedó en pie. Al punto de que el magistrado remarcó que coincidía "plenamente" con sus argumentos y validó como "perfectamente legítima" la forma en que obtuvo esas evidencias.Lijo convalidó en particular el allanamiento dispuesto en el departamento que tiene Amado Boudou en el complejo River View de Puerto Madero, como también acotó el alcance de los fueros del vicepresidente que intentó atribuirle la defensa de su íntimo amigo y socio comercial José María Núñez Carmona.Más aún, el juez remarcó que Boudou se encuentra "imputado" en el expediente, que "se le atribuye la posible comisión del delito de negociaciones incompatibles" y que, por tanto, puede defenderse por sí mismo, sin que el abogado de su socio deba o pueda inmiscuirse.Así, la investigación que quedó ahora en manos del fiscal Jorge Di Lello abarca una larga lista de pruebas e indicios considerados válidos por Lijo. Entre otros, los siguientes:Que el titular de la nueva Ciccone, Alejandro Vandenbroele, pagó las expensas y el servicio de cable y figuró como titular de una línea telefónica en ese departamento de Boudou en el River View.Que como inquilino de ese departamento figura un socio de Vandenbroele que vive en España desde hace años y vino apenas unos días a la Argentina entre 2010 y 2011 (además de que ese supuesto contrato jamás fue aportado ante la Justicia).Que Vandenbroele mantiene una relación directa, comercial y personal con Núñez Carmona.Que Boudou recomendó por escrito a la AFIP que le concediera...