Resoluciones 94 / 2006. Resolucion del 26 de Diciembre de 2006. Aviso Nro: 13251

• Fecha de la disposición: 17 de Enero de 2007
• Número de Boletín: 26456
• Fecha de Publicación: 17 de Enero de 2007

HONORABLE JUNTA ELECTORAL. RESOLUCION N° 94/06 H.J.E.P, del 26/12/2006. Ref. Partido “Convergencia y Unión (CyU) s/pedido de reconocimiento de Personería Jurídico Política”. VISTO:

La solicitud de reconocimiento de personería jurídico política, en jurisdicción de la municipalidad de Monteros, Departamento homónimo, de la agrupación de referencia, y CONSIDERANDO:

Conforme surge de los antecedentes del presente legajo se ha cumplimentado con los requisitos de los artículos 7° y 8° de la Ley 5.454. Así lo establece Resolución de fecha 04/10/06 corriente a fs. 36 de estas actuaciones. A fs. 39 vta. corre informe actuarial sobre el cumplimiento de lo establecido en el Art. 9° de la Ley 5.454. Que del análisis de la documentación arrimada se determina consonancia con el espíritu de la norma contenida en los artículos 28 y 29 de la citada ley. A fs. 80 consta la realización de la audiencia que manda el Art. 2° Inc. b) del Dcto. 1835/14 (Reglamento de la Ley 5.454) sin que persona alguna haya comparecido a formular oposición. Se glosan en autos las notificaciones a los partidos actuantes en la jurisdicción. De acuerdo al artículo 26° de la Ley N° 5.454 y a la Resolución del 22/04/03 corresponde que a la presente agrupación se le otorgue el número 086. Por ello y conforme lo dictaminado por la señora Agente Fiscal en lo Civil, Comercial y del Trabajo de la II° Nominación, se:

RESUELVE:

1. Reconocer personería jurídico política a la agrupación "Convergencia y Unión (CyU)" para actuar como partido político en la jurisdicción de la municipalidad de Monteros, Departamento homónimo. II.- Otorgar el número 086 al mencionado partido según lo dispuesto por el artículo 26 de la Ley 5.454 y Resolución de la H. Junta Electoral del 22/04/03. III.- Publíquense edictos por un día, Libre de Derechos, en el Boletín Oficial de la Provincia, haciéndose conocer la declaración de principios y bases de acción política, carta orgánica y la presente resolución. DECLARACION DE PRINCIPIOS Nos proponemos contribuir, con nuestro perseverante accionar a favor del Municipio de Monteros, a recuperar la confianza de los Monterizos, en los hombres políticos y en la política como principal instrumento de gestión del bien común, a partir de un accionar político éticamente intachable. De esa manera se aumentará nuestra gravitación nacional y provincial como estado Municipal. Promoveremos nuestros derechos en el marco de la solidaridad social con activa participación de toda la ciudadanía. Haremos una política que tenga como epicentro la defensa de los intereses del pueblo Monterizo, acorde con un rol activo que le asigne nuestra agrupación política las autonomías Municipales en el contexto provincial y nacional. Afianzaremos la familia como núcleo esencial de la sociedad, creando condiciones económicas, sociales y culturales para que a través de la vida digna que merecen todas las familias Monterizas, puedan generar los ciudadanos que la provincia y el país necesita. La cuestión económica tiene una relevancia central en el desarrollo integral de nuestro pueblo. Es un imperativo irrenunciable detener y revertir la decadencia económica de la ciudad. Por ello, el rápido crecimiento económico, con eficaces y simultáneos mecanismos que permitan la redistribución de la riqueza producida. Aspiramos a desarrollar una ciudad que sea una morada digna para sus hijos. Para ello, definimos como fines políticos prioritarios:

-Moralizar y transparentar el ejercicio de la política. -Impulsar una educación de gestión pública y privada igualitaria, sin distinción de clases sociales ni discriminación alguna. -Promover la cultura, extendiéndola a todos los estratos sociales. -Mejoramiento de la prestación del servicio público de salud. -Establecer planes modernos para que todo habitante del ejido municipal tenga acceso a una vivienda digna. -Combatir la desocupación creando condiciones para que la economía privada genere empleos genuinos. -Mejorar el funcionamiento de las instituciones públicas. -Integrar participativamente a la Iglesia en la asistencia social. -Favorecer la participación de empresarios, trabajadores y entidades intermedias en el diseño de las políticas públicas. El cometido básico de nuestra economía será la integración de cada comprovinciano en una sociedad donde - en tanto morada digna- se garantice el acceso a una calidad de vida creciente elevada. Entendemos al desarrollo humano como la suma del esfuerzo individual y colectivo, traducido en inversiones productivas que, reditúe beneficios para el conjunto de la sociedad. El capital privado tendrá seguridad jurídica para invertir y obtener tasas de rentabilidad razonables. Pero el Estado Municipal, en tanto garante y promotor del Bien Común, garantizará que los beneficios del progreso económico lleguen a todos. El progreso económico es compatible con la justicia social. No hay democracia estable ni paz social sin una equitativa distribución de la riqueza. La democracia es a la larga inviable en una sociedad donde la riqueza se concentre en pocas manos y la pobreza se extienda a la mayoría de la población. No queremos una clase dirigente rica con un pueblo pobre, condenado a asistencialismo estatal para sobrevivir. Repudiamos al clientelismo político, al que consideramos como una nueva forma de servidumbre. Nuestro ideario apunta a la transparencia en el manejo de la cosa pública. El gobierno debe ser ejercicio con decencia y eficiencia, al servicio de los intereses del Municipio y del conjunto del pueblo. Esta es la síntesis de cómo concibe Convergencia y Unión el ejercicio del poder político. Y bregaremos incansablemente para que esto sea realidad. Para combatir la pobreza y la marginalidad social, nuestras metas económicas consistirán en lograr un alto y sostenido ritmo de crecimiento económico, agotando todas las posibilidades -externas e internas- que puedan incrementar los recursos humanos y materiales disponibles, extendiendo los beneficios del crecimiento económico a todos los sectores, a través de un proceso integrador del interior del país con Buenos Aires, recuperando el ideal federal de nuestros antepasados, y grandes hombres que Monteros les dió al país. Si bien somos hombres de convicciones profundas, consideramos que el ejercicio de la política práctica exige ser flexibles y permeables a los requerimientos de la realidad. Descartamos los rígidos principios ideológicos fijados de antemano y que ignoran la realidad como marco de referencia insoslayables de la actividad política. Los ideales nunca van a morir. Nosotros los tenemos pero no somos propensos a cultivar el deporte del ideologismo. Desechamos la falsa premisa según la cual el crecimiento económico del país debe efectuarse a expensas del empobrecimiento de la mayoría de la población. Si bien no es recuperación económica sin sacrificio ni disciplina social, un país solidariamente responsable no puede renunciar a mecanismos de distribución de la riqueza creada en función del esfuerzo de cada sector. Propugnamos la orientación del gasto público hoy dilapidado en burocracias y en gastos innecesarios hacia las coberturas de las necesidades básicas de la población, como así también a financiar los cumplimientos plenos de sus funciones por parte del Estado. Aspiramos a administrar un estado fuerte pero ágil ni chico ni grande sino suficiente para transformarse en promotor y garante del bien común. Un estado que recaude bien pero que gaste bien. No queremos un estado eternamente endeudado, mendicante ya sea de la nación, de la provincia o de los grupos económicos para financiarse. Un Estado endeudado que gasta más de lo que tiene solo sirve a las minorías del privilegio. En lo externo, afirmamos la determinación de actuar con la mayor independencia posible en un mundo globalizado como el actual. Sin encierro defensivo y suicida dentro de nuestras fronteras, pero tampoco sin aperturismos indiscriminados. Procuraremos insertarlos en el concierto de las naciones, defendiendo nuestra identidad como pueblo, exportando nuestros productos, difundiendo nuestras costumbres y valores en todos los rincones de nuestro planeta. Optamos por un país fuertemente exportador de un gama crecientemente diversificada de productos primarios e industriales, para poder elegir lo que necesitamos importar del...