Otro detenido por los abusos en el instituto

La investigación por el abuso de al menos una docena de niños sordomudos en una institución religiosa mendocina, que el viernes derivó, luego de un trámite judicial urgente, en la detención de dos sacerdotes y un ex internado de la entidad, continúa avanzando. Otro hombre, que trabajaba como administrativo en el Instituto Antonio Próvolo, fue aprehendido ayer, señalado también como presunto responsable de los tormentos. No sólo eso: a la espera de que hoy declare una de las víctimas, el portal de noticias Mendoza Post reveló ayer que el mayor de los curas acusados ya había sido denunciado por abusos de menores en Italia, en 1984.

El último de los detenidos fue identificado como Jorge Bordón. Según relató una de las víctimas al fiscal Fabricio Sidoti, solía vestirse como cura para someter a los menores hipoacúsicos. Mendoza Post reveló ayer las identidades de los otros acusados del delito de abuso sexual: el sacerdote Nicola Corradi (conocido como "el padre Nicolás"), el cura Horacio Corbacho y José Luis Ojeda, un ex interno del instituto de Luján de Cuyo que depende del Arzobispado de Mendoza.

Ayer se conocieron nuevos detalles de la pesquisa. Los menores, que asistían a ese establecimiento católico especializado en niños sordos e hipoacúsicos eran abusados en un lugar dentro del instituto al que llamaban "La casita de Dios".

Desde una rendija, las víctimas observaban lo que los sospechosos hacían con sus amigos. Los hechos ocurrieron entre 2007 y 2008, por lo que muchas de las víctimas hoy son mayores de edad. Algunos de los niños tenían entonces 10 y 12 años; otros, entre 6 y 8, según...

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