Cristina Kirchner reclamó más cooperación con los países pobres

SEUL.- La presidenta Cristina Kirchner comenzó ayer aquí su participación en la cumbre del G-20 ante 31 ejecutivos de finanzas del Foro de Negocios, con un discurso de un tono diferente del habitual: sobrio, medido, sin acusar al auditorio de banqueros, pero ensalzando el modelo económico de su gobierno.Defendió su bandera de desalentar la especulación financiera y promover el desarrollo industrial, con empleo y buenos salarios en los países emergentes.En su primer discurso en el exterior tras la muerte de su esposo, Néstor Kirchner, abogó por poner las finanzas al servicio de la producción y señaló que para resolver la "guerra de monedas" hace falta "más cooperación" entre países desarrollados y emergentes."Esta crisis fue vista como financiera y, en realidad, es estructural - señaló la Presidenta-. Si aplicamos soluciones financieras, el problema no desaparecerá." Fue una velada referencia a la decisión de los Estados Unidos de inyectar 600.000 millones de dólares en su economía, lo que desató un conflicto con Alemania, Francia, China y Brasil porque la devaluación del dólar les quitará competitvidad a esas economías."Ni guerras ni autodefensas -reclamó- que luego terminen impactando negativamente en el funcionamiento de la economía global. No debemos transferir siempre el costo de la crisis a otros países."Eso se debatía desde anoche dentro de la V Cumbre de Presidentes del G-20, en el centro Coex de Seúl.La "cooperación" se traduciría en que los países ricos transfieran a los no desarrollados "más financiamiento para la industria y para la infraestructura", y no para la especulación y la fuga de capitales. Su discurso fue bien aceptado con aplausos, aunque no estridentes, por esos empresarios de las finanzas de primer orden mundial.El modeloCristina Kirchner destacó aspectos positivos del modelo, como el crecimiento y el alza del consumo, pero se cuidó de mencionar la poca inversión, la alta inflación -cuyo debate se recalienta en Buenos Aires-, los índices del Indec y la pobreza.El salón Mugunghwa del hotel Sheraton Walkerhill, escenario de la Cumbre de Negocios del G-20, que precede al de los presidentes, sirvió para que la jefa del Estado disertara, aún de negro por el luto; fue cálidamente recibida y despedida por los ejecutivos.El ex presidente del Banco Central Mario Blejer, que fue como invitado, la felicitó: "¡Muy bien...