Cristina quiso ponerse al frente de la decisión

La presidenta organizó ayer en la residencia de Olivos la sexta cadena nacional del año para ponerse al frente del ajuste fiscal que sus ministros anunciaron horas antes con un fuerte recorte de los subsidios a los servicios de agua y gas: afirmó que

, y les reclamó a los industriales que, a cambio de eximirlos de ese ajuste, la "ayuden a cuidar el modelo" y no aumenten los precios.

Por si quedaban dudas, les advirtió que les hará "un seguimiento para ver cómo se comportan". El ministro de Economía, , había anticipado por la mañana que los empresarios que suban sus precios serán castigados con la quita de los subsidios.

La primera mandataria decidió así exponer su figura ante las críticas por el ajuste, que provienen de sectores opositores y sindicales. Pero al mismo tiempo les exigió esfuerzos a los empresarios: los industriales son los grandes ganadores del modelo y les llegó la hora de poner el hombro, según su visión.

, dijo la Presidenta.

"Me siento la madre del país y de los 40 millones de argentinos", señaló Cristina Kirchner, rodeada de casi todos sus ministros y del gobernador bonaerense, Daniel Scioli, en el quincho de la quinta presidencial. Desde allí anunció también nuevos subsidios y créditos para pymes y parques industriales e inauguró por videoconferencia una planta de colada continua de la siderúrgica Ternium Siderar (del grupo Techint), en San Nicolás.

La obsesión de Cristina Kirchner era en los últimos meses buscar el modo de evitar el costo político de anunciar los recortes de subsidios, que provocarán un fuerte aumento en las facturas de los servicios para usuarios domiciliarios y comercios. Por un lado, la Presidenta eximió a las industrias para que éstas no padezcan una suba de costos y que luego la trasladen a los precios. La preocupación del equipo económico es que no se desborde la inflación y ello impacte negativamente sobre el consumo y sobre la actividad económica.

Por otro lado, la mandataria eligió hacer el anuncio el mismo día en que el Gobierno anunció que en 2013 el PBI creció 3% y que, por lo tanto, no deberá pagarles a sus acreedores que suscribieron el cupón PBI. La buena noticia del día, entonces, debía ser que el Tesoro se ahorrará 3000 millones de dólares este año.

La "reasignación de subsidios" fue la última medida que contradijo el libreto original del modelo económico fundado por el fallecido ex presidente Néstor Kirchner.

En los últimos meses, la Presidenta decidió devaluar el peso, subir las...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR