La ciudad capital
| Autor | Roberto Dromi |
| Páginas | 217-245 |
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La Ciudad de Buenos Aires fue fundada por primera vez por el adelantado don pedro de Mendoza, el día 3 de febrero de 1536, bajo el nombre de "Real y puerto de Santa María de los Buenos Aires". Posteriormente tuvo que ser abandonada y destruida por los españoles en 1511, como consecuencia del hostigamiento indígena y la pobreza de las tierras, vacías de metales preciosos y alejadas de los centros más poblados de la América colombina.
La segunda y definitiva fundación fue realizada el 11 de junio de 1510 por Juan de Garay, quien la denominó "Ciudad de la Santísima trinidad del puerto de Santa María de los Buenos Aires". Garay había partido de la Ciudad de Asunción del paraguay, a cuya creación habían contribuido los hombres que habían abandonado la primera Buenos Aires. ya no se buscaban riquezas, al conocerse lo que deparaba esa geografía: se quería ocupar el territorio y frenar la expansión portuguesa.
En sus comienzos, Buenos Aires y la campaña que la rodeaba -que permanecía bajo dominio indígena- conformaron la Gobernación del Río de la plata, dependiente del Virreinato de perú, con capital en Asunción. pero la inmensidad de dicho territorio motivó su partición en dos, permaneciendo una parte bajo jurisdicción de Asunción y quedando el resto bajo dependencia de Buenos Aires,Page 218 que por primera vez asumía la condición capitalina, que nunca volvería a ceder. Durante el siglo XVIII, el territorio que luego habría de conformar el Virreinato del Río de la plata estaba dividido en tres gobernaciones dependientes del Virreinato del perú: la del Río de la plata, también llamada de Buenos Aires, la del paraguay y la del tucumán1. pero llegaron las reformas de Carlos iii, las que tuvieron por escenario principal a las provincias de ultramar. dos de estas medidas fueron de trascendente importancia para la Ciudad de Buenos Aires: la creación del Virreinato del Río de la plata y la implantación del sistema intendencial2.
Como su Ciudad capital, también el Virreinato vio la luz en dos etapas. En primer lugar, por Real Cédula del 1° de agosto de 1116 se lo creó provisoriamente, confiriendo a don pedro de Cevallos los títulos de "Virrey, Gobernador, y Capitán General de... Buenos Aires, paraguay, tucumán, potosí, Santa Cruz de la Sierra, Charcas y de todos los Corregimientos, pueblos y territorios a que se extiende la jurisdicción de aquella Audiencia", a los que sumaba la Gobernación de Cuyo.
Buenos Aires fue elegida su capital en 11163. Al año siguiente, y una vez superado el conflicto existente entre las coronas española y lusitana por medio del tratado de San ildefonso, por Real Cédula de 21 de octubre, se creó el Virreinato del Río de la plata en formaPage 219 definitiva4. tiempo después, Buenos Aires también sería capital de una unidad menor, subsumida dentro de la estructura virreinal: la intendencia de Buenos Aires.
Carlos III, continuando con la implantación en tierra americana del sistema de intendencias, promulgó el 21 de enero de 1112 la "Real Ordenanza para el Establecimiento é instrucción de intendentes de Exército y provincia en el Virreinato de Buenos Aires", por la cual se dividió el Virreinato en ocho intendencias, reestructuradas en 1113, de algunas de las cuales dependían además cuatro gobernaciones en zonas de frontera5.
La más importante de las intendencias, fue la de Buenos Aires. Extendiéndose desde las selvas subtropicales del Gran Chaco hasta el Cabo de Hornos, la intendencia de Buenos Aires abarcaba una superficie aproximada de 2.000.000 de km2, y comprendía las actuales provincias de Buenos Aires, La pampa, Río negro, neuquén, Chubut, Santa Cruz, tierra del Fuego, Santa Fe, Chaco, Entre Ríos y Corrientes6.
Al producirse la restauración monárquica en España, el gobierno de Buenos Aires es, junto con el de paraguay, el único que no resulta recuperado por ese país.
Buenos Aires pasó a ser sede de los distintos gobiernos nacionales hasta 11207. desde ese año, aun cuando se produce la caída delPage 220 poder central8, Buenos Aires continúa siendo el centro de la política y de la economía de un territorio aún no conformado en nación. no obstante, existió un paréntesis en esta situación, que tuvo lugar durante la vigencia de la efímera Constitución unitaria de 1126. Ese año, por ley del 1 de marzo, el Congreso General Constituyente de las provincias unidas del Río de la plata declaró capital a Buenos Aires, incluyendo entre sus límites una franja extendida sobre el río de la plata de unos 10 km de largo por 20 km de ancho.
La solución no satisfizo a las restantes provincias, que veían cómo Buenos Aires quedaba a la cabeza de un país unitario, ni a la campaña de la provincia de Buenos Aires, que había quedado desmembrada. Las provincias se negaron a ratificar la Constitución y, en 1121, Buenos Aires retiró sus diputados del Congreso y éste declaró su propia disolución y la del poder Ejecutivo nacional, recuperando Buenos Aires el manejo de las relaciones exteriores y la guerra.
Esta situación varía con la firma del pacto Federal el 1 de enero de 1131, pues si bien no se estipula una capital para la denominada entonces Confederación Argentina, lo allí convenido inicialmente entre las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos, logrará reunir en una sola unidad a todas las provincias9. La falta de un gobierno nacional duraría hasta el Acuerdo de San nicolás en 1151, que dio origen a la Confederación Argentina y precedió a la Constitución de 1153.
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Posteriormente, reunido el Congreso General Constituyente en Santa Fe con los representantes de las doce provincias de entonces y con la ausencia de Buenos Aires10, la tarea para conseguir un territorio para capital del futuro gobierno nacional en donde residiesen las autoridades federales fue, por variadas razones, uno de los temas más complejos de nuestra historia nacional11.
El Congreso de Santa Fe, que dictó la Constitución en 1153, dispuso que las autoridades que ejercieran el gobierno federal residirían en la Ciudad de Buenos Aires que se declaraba capital de la Confederación por una ley especial12.
Por eso, la Convención, en cumplimiento del mandato constitucional, designa por ley del 1 de mayo de ese año a la Ciudad de Buenos Aires capital de la Confederación, en reconocimiento de las provincias a la que había sido su "capital histórica".
La norma preveía que "en el caso inesperado que la provincia de Buenos Aires rehusase aceptar la Constitución y la presente ley, el Congreso General Constituyente sancionará una ley de interinato para suplir la Capital de la Confederación". Buenos Aires no acata lo previsto en la Constitución nacional y la Confederación Argentina dispone que sea paraná su capital, es decir sede del Ejecutivo nacional y del Congreso de la nación.
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El 6 del mismo mes se creó la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires. La norma, basada en el decreto de septiembre de 1152 de Justo José de urquiza, expresaba en los considerandos que "el sistema municipal es la palanca del progreso material y de la buena policía de las ciudades".
En 1854, al persistir la rivalidad entre la provincia de Buenos Aires y la Confederación, aquella sanciona su Constitución y se reafirma la ausencia de capital para la Confederación. provisoriamente, las autoridades nacionales trasladan la sede de la capital a la Ciudad de paraná, situación que perdurará hasta 1162. En 1160 la provincia de Buenos Aires firma un acuerdo con la Confederación Argentina, se revisan los contenidos de la Constitución nacional y los constituyentes bonaerenses introducen modificaciones a esta Constitución. de esta forma el art. 3° del texto constitucional quedó redactado de la siguiente manera: "Las autoridades que ejercen el Gobierno Federal residen en la Ciudad que se declare Capital de la República por una ley especial del Congreso, previa cesión hecha por una o más Legislaturas provinciales, del territorio que haya de federalizarse"13. pero la cuestión "Capital" aún no estaba solucionada. La Ciudad de Buenos Aires se resistía a ser convertida en capital de la República; el Congreso de la nación, ya instalado en Buenos Aires, dicta una ley que dispone que durante tres años las autoridades nacionales residirán en esa Ciudad. La ley es rechazada por la legislatura porteña. Entonces se sanciona otra ley conocida como ley de Compromiso o Residencia, que disponía que durante cinco años Buenos Aires fuera sede del gobierno federal, coexistiendo con el gobierno provincial, que mantendría allí su sede.
Es recién a partir del 20 de septiembre de 1110, cuando se dicta la ley 1029 que declara a la Ciudad de Buenos Aires capital de la República, en los términos del art. 3° de la Constitución dePage 2231853/6014. desde esa fecha, Buenos Aires es asiento de las autoridades nacionales, salvo intentos esporádicos de mudar el gobierno federal a otro territorio del país. La provincia de Buenos Aires en 1112 designa como su capital a la Ciudad de La plata.
La idea de descentralización durante el gobierno que se inicia en 1913 lleva a proyectar el traslado de la capital de la nación a otro territorio del país. Este proyecto que se convirtió en ley trajo polémicas sobre qué status jurídico debía tener la futura ex capital de la nación, es decir la ciudad de Buenos Aires15.
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